POR: ADIEL ARMANDO B.

La corrida del mero día del LXXII aniversario de la Monumental Plaza México quedó mucho a deber, sobre todo por el juego de los toros de la dehesa de Jaral de Peñas que más allá de su buena presencia, adoleció de falta de raza y ello mermó el desempeño su desempeño. Aun así, quien se llevó el “gato al agua” fue el espada francés Sebastián Castella al cortar la única oreja del esperado festejo.

Y ante una muy buena entrada en tarde algo nublada, sus alternantes, a pesar del esfuerzo que desplegaron, se fueron de vacío, Jerónimo, quien bien pudo haberse hecho de un apéndice; Joselito Adame y el peruano Andrés Roca Rey.

Al toro  que abrió plaza, aquerenciado y rajado desde un principio, el espada poblano JERÓNIMO lo recibió con vistosos lances a pies juntos. Con la muleta, tras intentarlo torear en los medios y de estarlo persiguiendo pues salía suelto, terminó en tablas haciéndole una faena recia y torera, con personalidad, de pleno aguante, sobre todo por el pitón derecho y a pesar de los gañafonazos que tiraba el jaralpeñero. Labor de aliño para matar de certera estocada que bien pudo haber sido premiado con una oreja pero todo quedó en una fuerte ovación.

En su segundo nada logró hacer Jerónimo con el capote. Su labor de muleta, a otro ejemplar con tendencia al refugio de los tableros, fue a base de darle una lidia valiente y porfiona en la misma zona, “robándole” muletazos de gran mérito por el pitón derecho, intercalando toreros adornos. Sin embargo, se la pasó más el torero persiguiendo al manso aunque si demostrando su deseo por querer agradar y triunfar pero así fue menos que imposible. Terminó de pinchazo y estocada entera para tener silencio.

El galo SEBASTIÁN CASTELLA al primer astado de su lote, “Luminoso”, nada fácil y rajado pero con algo de nobleza, lo lanceó con aseo a la verónica y valiente se vio en un ajustado quite por saltilleras. Tras el tercio de banderillas se desmonteró el subalterno francés Rafael Viotti. Con la sarga, a base de tenerle siempre el engaño en la cara del toro, le cuajó una brillante faena por ambos lados con temple, arte y mucho talento, además de instrumentar un cadencioso toreo en redondo, lleno de ritmo y estupendo trazo, todo realizado en la zona de tablas. Manoletinas para abrochar el emotivo trasteo para dejar una estocada trasera, tendida y caída, siéndole concedida una oreja a petición del público.

A su segundo vio como lo regresaron a los corrales tras despitorrarse desde la cepa del lado izquierdo cuando embistió al peto del picador. En su lugar salió otro ejemplar de la dehesa titular de Jaral de Peñas, al que Castella lo lanceó con voluntad. El banderillero Gustavo Campos saludó desde el tercio luego de colocar dos buenos pares de garapullos. Con la muleta, Sebastián realizó una faena meritoria con las dos manos, de mucha técnica e inteligencia para entender las condiciones del “socio” que era soso pero con cierta nobleza cuando se empleaba en el engaño y cuando lo forzaba el torero a embestir. Acortó la distancia y así logró hacer el toreo circular. Dejó dos pinchazos y una estocada trasera y tendida. Silencio.

En el primer ejemplar que le tocó en suerte, soso y complicado, el aquicalidense JOSELITO ADAME lanceó con voluntad, viéndose mejor en un quite por chicuelinas. Con la franela comenzó en los medios con cinco ayudados por alto, dos ayudados por bajo y el de pecho para luego darse a realizar una faena más que empeñosa por los dos perfiles, estando muy por encima de su desrazado antagonista. Terminó de estocada tendida y caída para tener silencio.

En su segundo, Joselito jugó los brazos de manera estupenda en lances a la verónica y se hizo ovacionar en un quite por gaoneras y una caleserina. El rehiletero Ángel González compartió la salida al tercio con su compañero Héctor Rojas. Con la muleta, Adame empezó con cambiados por la espalda, un desdén y el de pecho para después probar al toro por ambos lados, siendo por el derecho por donde logró sus mejores momentos, a pesar de un susto sin consecuencias. El astado vino a menos y Joselito le pisó los terrenos para sacarle muletazos de mucha relevancia, sobre todo una serie completa de luquesinas. Mató de estocada honda aguantando trasera y caída, además de descabello.

El limeño ANDRÉS ROCA REY al primer burel de su lote lo recibió en tablas de rodillas con una larga cambiada y de pie veroniquear con clase y calidad. Con la muleta y en los medios le instrumentó dos cambiados por la espalda y los de pecho para continuar valeroso en varias series derechistas, lo mismo que por naturales a un astado soso y áspero. Hizo el toreo en redondo con mucho mérito. Acabó de estocada tendida para escuchar palmas.

Y en el que cerró el festejo dio algunos paroncitos con estética, estando mejor en un quite por gaoneras. Con la muleta ha ejecutado un trasteo dispuesto con las dos manos pero ante la poca trasmisión del toro le fue difícil a Roca Rey poder expresar su toreo, que por momentos logró algún lance plausible. Abrevió y mató de dos pinchazos, otro soltando y descabello para ser despedido con división de opiniones.

FICHA: CIUDAD DE MÉXICO, CDMX. Segunda y última corrida del LXXII aniversario de la Monumental Plaza México. Entrada: Muy buena en tarde algo nublada. Toros de Jaral de Peñas, bien presentados pero dejando  mucho que desear en su juego. Jerónimo: Ovación y silencio. El francés Sebastián Castella: Una oreja y silencio. Joselito Adame: Silencio y ovación. El peruano Andrés Roca Rey: Palmas y división de opiniones.

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