POR: J.C.M.
Joaquín Galdós tras tomar la alternativa el año pasado de la mano de José Cutiño y FIT Tauromaquia, puso su destino profesional de cara a 2017, año de su confirmación, en manos de Antonio Sanz. Sin acabar la temporada ambos han anunciado inesperadamente el final de la relación.
Cierras la etapa Cutiño, inicias 2017 con un nuevo apoderado, Antonio Sanz y Campo Bravo y en tan solo unos meses ponéis punto y final a vuestra relación. ¿Qué ha sucedido, Joaquín?
Con Antonio Sanz se hizo un buen trabajo al inicio de temporada y tuve la oportunidad de torear algunas corridas que me aportaron mucho pero después me he dado cuenta de que no era la persona idónea para entrar en las ferias de primera categoría, en alguna de las cuales podría haber entrado por derecho propio. Por supuesto el trato ha sido excelente, él me ha ayudado en todo lo que ha podido y no me arrepiento de nada. Pero a día de hoy necesito a una persona que tenga acceso a esas ferias, especialmente Sevilla y alguna que otra de Francia, de las que me he quedado fuera.
Luego la decisión más allá del convencional «mutuo acuerdo» es tuya…
Llega un momento en el que a Antonio no le quedan muchos más festejos que organizar y él mismo se da cuenta, me dice «hasta aquí llego, Joaquín». En Madrid no hubo suerte y necesito entrar en un par de ferias importantes en las cuales no tiene capacidad para ponerme. Este año ya he toreado en los pueblos, en sus plazas y creo que yo era un proyecto muy difícil para él. El camino recorrido juntos hasta ahora ha estado bien pero toca llegar a un punto inalcanzable para Antonio. Económicamente no le convenía apoderarme y si en algunos sitios tiene que contar con otros toreros no tiene compromiso conmigo. Ya no teníamos nada que aportarnos el uno al otro.
¿Tienes propuestas para apoderarte o terminas el año en solitario?
No he tomado esta decisión teniendo nada en mente más bien porque toreo hoy en Dax y creo que es un escaparate idóneo. Hemos estado un tiempo distantes y he sentido que es buen momento porque tengo por delante varias corridas y de seguir como he empezado el año mi carrera tomará un camino mejor, me toca ya caer en buenas manos. A raíz del anuncio de la ruptura he recibido alguna llamada, haré yo otras también pero ahora mismo está todo en el aire y no tengo prisa.
Eres una persona muy madura, con personalidad, ¿en qué medida crees que influirá en la plaza lo sucedido?
Creo que en nada. Desde que soy un niño he caminado solo sin el apoyo moral de apoderado alguno. Sí es cierto que hoy en día para entrar en algunas ferias hay que tener un apoderado fuerte salvo que triunfes en Madrid. Al tener la temporada casi hecha me puede incluso servir como un incentivo porque a nadie le gusta estar solo pero afectar me afectan las injusticias y las mentiras y este no ha sido el caso. Para tener una persona a tu lado sin ilusión o convencida mejor dejarlo.
¿Cuánto te ha podido influir en todo esto la mala tarde de tu confirmación en San Isidro con la corrida de Juan Pedro?
No pude hacer mucho con los toros que tuve delante, fue una corrida decepcionante. Considero que fue un paso al frente en mi carrera, pasé el examen de Madrid con nota, una plaza que igual te puede lanzar que te puede hacer mucho daño aunque ninguno de esos fue mi caso. Dejé detalles con el capote, maté bastante bien uno de los toros, di quince o veinte pases buenos con la muleta… pero no llegó el triunfo. Fue una tarde de las que ni te quita ni te da. No estoy triste pero fue sin duda una oportunidad perdida y soy consciente de que hay que coger todas las que vengan como he hecho desde el inicio de temporada por pequeñas que sean.
¿Qué tienes cerrado hasta el final de la temporada?
Después de Dax voy a Leganés donde comienzo mi incursión en las corridas llamadas duras, luego San Bartolomé de Pinares el día 24, Robledo de Chavela el 26 y en septiembre tengo cerradas otras cinco o seis corridas.