Próximo a torear en Beziers
Ha sido tomando parte en tomando en tientas y en labores relacionadas con su profesión en ganaderías de diferentes encastes, todas ellas de primera línea
ADIEL ARMANDO BOLIO
Desde territorio español se reporta el prometedor novillero mexicano Arturo Gilio, quien se encuentra por aquellas latitudes desde hace ya varios meses algunos meses y afirma que no le ha bajado a la intensidad de su preparación, todo con miras a sus próximos compromisos.
Un ejemplo de ello es que apenas esta semana se la pasó en el campo bravo ibérico tomando parte en tientas y labores relacionadas con su profesión en ganaderías de diferentes encastes, todas ellas de primera línea.
Primeramente, se hace saber que se trasladó a Cádiz para estar en la finca donde se halla la dehesa gaditana de La Palmosilla, misma que tiene encaste de Domecq. Luego, estuvo en la hacienda cacereña de Ana Mayoral, de encaste Santa Coloma y para cerrar la semana estuvo de visita en la ganadería lusitana de Álvaro Núñez del Cuvillo.
En todas ellas, Gilio tuvo la oportunidad de alternar con matadores de toros y novilleros punteros de España y Francia, siempre estando a la altura de las circunstancias y demostrando que es un torero que puede llegar muy alto entre la torería de allá y de acá.
Así pues, de Arturo se sabe que tiene en puerta un compromiso en la próxima Feria de Beziers, Francia, el sábado 14 de agosto, donde estoqueará en festejo matinal, novillos de la dehesa gala de Grand Badon, con divisa en azul, amarillo y rojo, propiedad de don Philippe Cuillé, al lado de sus alternantes, el local Carlos Olsina y el gaditano Christian Parejo.
De esta manera, el novillero lagunero Arturo Gilio sigue en su avance rumbo a la consolidación novilleril que está buscando en ruedos de Europa y México para llegar a la alternativa con todos los honores.
DATO
El coahuilense ha estado en las dehesas, la gaditana de La Palmosilla, la cacereña de Ana Mayoral y la lusitana de Álvaro Núñez del Cuvillo
Pie. Arturo Gilio durante su estancia en la ganadería de La Palmosilla / Cortesía Gilio