El coso Monumental de Aguascalientes registró tres cuartos de entrada, en tarde calurosa, este domingo 5 de mayo, para la celebración de la décima quinta y última corrida de la CXCVI edición de la Feria Internacional de San Marcos 2024, resultando como triunfador el espada anfitrión Luis David Adame, al cortar tres orejas que le abrieron la Puerta Grande de “San Marcos”. Sus alternantes, el irapuatense Diego Silveti y el limeño Andrés Roca Rey, cortaron un apéndice cada uno.
Se lidiaron seis toros de la ganadería jalisciense de Villa Carmela, siendo el encierro más completo de la feria por su comportamiento y juego. Destacaron los lidiados en segundo, tercero, quinto y sexto lugares. Regular, pero, débil, resultó el primero y, regular fue el cuarto.
El guanajuatense Diego Silveti, en el toro que abrió plaza, llamado “Incondicional”, noble, débil y tardo, aplicó lances a pies juntos de calidad y mejor quitó por ceñidas gaoneras. Con la muleta, comenzó doblándose para dar derechazos en dos empeñosas series. Por naturales no encontró respuesta y persistió con la diestra para conseguir otras tres tandas meritorias y acortando distancias, poniendo la emoción que el toro no tenía. Joselillinas ajustadas sin ayudado para cerrar y acabar de estocada entera recibiendo una oreja bien ganada.
A su primero, que fue emotivo, el peruano Andrés Roca Rey, lo capoteó voluntarioso. Con la sarga, ejecutó un trasteo a base, primero, de lances de tanteo, para seguir por derechazos recios y de buen calado en tres racimos artísticos, plenos de temple y largueza. Con la zurda le largó la mano con hondura y exposición. Otro tanto de toreo diestro de gran dimensión logrado a través de su poder muletero en otras dos tandas. Mató de estocada caída para ser aplaudido.
El de casa, Luis David Adame, en su primero, “Apasionado”, enrazado, pero, que se fue apagando, veroniqueó enclasado y quitó en los medios por chicuelinas y caleserinas. Sufrió tumbo el piquero Mauro Prado. Con la pañosa, Luis David inició con ayudados por alto, cambiado por la espalda, el de pecho y el desdén, continuando por derechazos en dos esmeradas tandas. Por naturales le pudo igual y aguantándole. Otros dos capítulos diestros de lucida exposición. Naturales esforzados y ajustadas manoletinas para cerrar. Acabó de estocada honda para hacerse de una oreja que devolvió a la cuadrilla.
A su segundo, noble, pero, que terminó defendiéndose, Silveti le recetó lances a pies juntos y un brega solvente. Buena vara del picador Efrén Acosta López. Tras el segundo tercio se desmonteró Aldo Navarro. Con la franela, Diego se dio a realizar una faena con prestancia y estética al oficiar con la mano derecha en dos series. Al natural le sacó otro buen par de tandas. Mejor estuvo por el derecho atemperando. Concluyó de pinchazo y estocada honda para ser aplaudido.
Roca Rey en su segundo, “Mayoral”, que evidenció emotividad, se lució en artesanos mandiles. Luego del segundo tercio se destoco el banderillero Christian Sánchez. Con la tela escarlata, tras brindarle al matador Arturo Macías, Andrés cuajó una faena pletórica de buen gusto y excelente trazo por derechazos hasta en tres racimos de mano baja, plenas de calidad. Con la izquierda corrió la mano con amplia longitud y mucha dimensión. Nuevamente con la diestra, tras darle su tiempo y su espacio al buen toro, le largó pases enclasados. Hizo el toreo en redondo, ligó un cambiado por la espalda y el de pecho en un palmo de terreno y, desplante incluido, para matar de estocada caída, siendo premiado con una oreja que se le protestó y acabó regresando a la cuadrilla.
Luis David, a su segundo, “Caporal” de nombre, emotivo y alegre, de hinojos y en tablas, le dio una larga cambiada y, de pie, lanceó con calidad a la verónica. Lo llevó al caballo por chicuelinas caminándole y quitó vistosa y variadamente. Cubrió espectacular el segundo tercio entre ovaciones. Con el lienzo grana, ligó un trasteo a base de enjundia y atemperancia por derechazos en dos tandas. Al natural se gustó y gustó a la concurrencia. De nuevo con la diestra, previo molinete, engarzó tersos pases en otro par de racimos bien estructurados. Otro capítulo izquierdista empeñoso y manoletinas para abrochar. Terminó de media estocada para serle otorgadas las orejas entre división de opiniones para al final salir en hombros por la Puerta Grande de “San Marcos”.